24 de agosto de 2012
El plan para hoy es ir al Parque Natural de Plitvice así que
madrugamos mucho para no llegar muy tarde y poder aparcar bien. Desayunamos con
la fresca en nuestro maravilloso cenador (¡cómo me gusta este lugar!) y después
salimos hacia el parque.
Este es nuestro cenador a primera hora de la mañana
Aparcamos bastante bien teniendo en cuenta que ya hay
un montón de gente. Una vez dentro del parque tenemos que coger unos autobuses
que nos bajen a la ruta que vamos a hacer. Hay varias, pero nosotros nos
decidimos por una bastante dominguera. El parque es muy bonito pero nos pasa lo
mismo que en Krka: nos sobran turistas.
Siempre he escuchado que una imagen vale más que mil palabras, así que hoy os dejo las imágenes del parque porque no hay nada destacable que contar con palabras.
Ojo al cartel y al caso que le hacemos todos
Esta foto es mi actual fondo de escritorio. Me encanta.
Después de un rato de caminata cogemos un barquito para
cruzar al otro lado y, a pesar de ser sólo las 12:30 decidimos tomarnos un
descanso y comer una vez salimos del barco. Encontramos una mesa en la sombra
así que no hay más que hablar, hacemos cola en el restaurante y pedimos
nuestras hamburguesas con queso y nuestros refrescos. La verdad es que a pesar
de ser muy pronto para comer nos sienta genial porque estamos cansadillos ya.
Hoy hemos madrugado mucho.
Continuamos con la visita después de comer. La gran atracción
del parque es la catarata pero cuando llegamos a ella nos decepciona un poco
porque tiene poca agua. Imagino que lo bonito será ver el parque en otra época
en la que haya más lluvias.
La "gran" cascada. Parece ser que en invierno gana bastante. En verano hay poca agua.
Una vez vista la "gran" catarata la senda nos lleva directamente a la salida. Poco a poco subimos por el camino hasta que llegamos al punto de encuentro con el resto de turistas (como si les hubiéramos perdido de vista en algún momento) para coger el bus de vuelta. Nos encontramos con un chiringuito y nos compramos unos helados tipo calipo para hacer más llevadera la espera. Estamos muy cansados y lo único que queremos es sentarnos. Nos da igual dónde. Qué pena que a las avispas, lo que queramos nosotros, les de lo mismo. Al final acabamos todos dispersados para evitar que nos piquen.
Comiendo nuestros helados antes de la invasión de las avispas
De vuelta en el bus
El resto de la tarde es muy tranquila. Vamos a casa y después de refrescarnos un poco nos bajamos al cenador a jugar una partidita de dados. En principio vamos a jugar todos, pero Cris, que ha cogido cobertura y wifi se queda hablando con su chico por Skype mientras nosotros disfrutamos de los rayos de sol en el cenador. Al poco de estar allí llega el dueño de la casa con una bandeja con un postre casero que ha hecho su madre para nosotros. Creo que lo ha hecho por las molestias de la ducha del día anterior. Nos hace mucha ilusión y nos parece un detalle. Por supuesto hacemos un alto en lo que estamos haciendo para merendar.
Poco después viene la dueña y nos dice que ha comprado el "fu-fu" de los mosquitos que ayer Ana le pidió. Recordad que Ana le preguntó si tenía y como la respuesta fue negativa hoy ha ido a comprar. Otro detallazo.
Puesta de sol desde el cenador
Después de la partida nos preparamos para salir a cenar. Vamos en coche al pueblo y cenamos en una terraza. El pueblo es muy pequeño y está dividido por la carretera pero no se está mal. El menú se divide entre dos platos fundamentalmente: pizza las niñas y carnaza los niños.
A las 22:30 estamos metiéndonos en la cama. Hoy hemos madrugado, pero mañana nos toca madrugar todavía más (lo de pasado mañana prefiero no pensarlo porque eso sí que va a ser la risa) Hoy el día ha sido tranquilo, pero nos ha venido bien relajarnos por la tarde.
Comentarios
Besotes!!!
No sabia que Croacia fuera tan bonito.
Besos.
Los señores de la casa eran monisismos. LA tarta fue todo un detalle ;-P
Muas
Susana, es bonito, pero también es cierto que la cantidad de gente le quita muuuuuuuuuucho encanto.
Señor Anónimo (me inclino a que que eres Javi pero vete tú a saber...) es verdad que después de comer fue un poco largo el paseo, no lo recordaba. Y sí los señores de la casa eran monísimos :-)
Besos!
Un beso