Cierra los ojos y huele a tu alrededor

Es curioso cómo muchas veces un olor nos transporta desde el lugar en el que nos encontramos a otro muy lejano en el tiempo, a un recuerdo o a una sensación. Recuerdo olores de mi infancia que no he vuelto a oler desde entonces y no soy capaz de recordar uno que he olido hace diez minutos. ¿Por qué? Pues porque este último olor no me ha aportado absolutamente nada.

Hoy he entrado en crisol a echar un vistazo a los libros y nada más cruzar la puerta he aterrizado directamente en otro año, en otro lugar y con otras personas. Había un señor mayor a mi izquierda y no me avergüenzo de confesar que el minuto y medio que hemos coincidido en la tienda antes de que se marchara, le he perseguido allá a donde ha ido. ¿Era un señor mayor de estos que tienen un punto sexy y que parece atractivo a todas las chicas? No, para nada. Más bien era un viejecillo con gafas de pasta dura y que a mí me ha parecido entrañable. Olía igual que mi abuelo y me ha recordado a él. Hace ya años que mi abuelo murió, pero me acuerdo de él bastante a menudo. Hoy he olido la colonia de mi abuelo durante un rato, y ha sido gracias a esa colonia que he recordado otras muchas cosas como su manera de coger la cuchara para comer la sopa, su manera de achucharnos a mis hermanas y a mí o su calva llena de pequeñas pecas. Por un momento me ha parecido que podía ver todas esas imágenes.

Recuerdo un día que no pude dejar de mirar a un señor que iba en el metro porque se le parecía mucho. Pasé un buen rato mirándole hasta que me di cuenta de que estaba siendo un poco descarada y el hombre me pareció que estaba un poco mosca. Pero no lo podía evitar. Cada poco la vista se me iba hacia la cara de aquel hombre, que ahora me miraba a mí, esperando que le mirase. Al igual que me pasó el otro día en crisol, no me importó que se me notara que le estaba mirando.

Pero volviendo al tema de los olores es curioso cómo sólo por el olor puedes en la actualidad identificar en qué tienda de ropa estás, en qué discoteca o en el coche de quién. Puedes pasar años sin oler algo en concreto pero eso no significa que lo hayas olvidado o que lo vayas a olvidar. ¡Que va! Basta con oler algo que sea similar para que te evoque distintos recuerdos o te transporte a épocas pasadas.

Después de todo hay quien dice que todo tiempo pasado fue mejor…

Comentarios