Antes de montar en el Dragon Khan el otro día me decidí a subir a la Estampida. Parecía más pequeña y ¡qué diablos! por alguna tenía que empezar... Mi hermana me dijo que seguro que me gustaba, que lo único "malo" era la primera bajada, pero que lo demás estaba bien. Eso sí, eso fue sólo un consejo porque subir lo que se dice subir, no subió.
De la atracción vi más bien poco desde abajo, por lo que fui con la idea de que después de la primera subida estaba la primera bajada que decía mi hermana. Soy cagueta, ya lo he puesto en el título del post así que no es ningún secreto para nadie, por lo que me dije a mí misma que la primera bajada era mejor hacerla con los ojos cerrados. Mi intención realmente era abrirlos a mitad de camino para después disfrutar de la atracción entera. Aquí quizás sea necesario hacer un alto y explicar que cuando el año pasado estuve en EuroDisney (¡a mi edad!) fue la primera vez que monté en una montaña rusa y me gustó la experiencia. Lo bueno, y al mismo tiempo lo malo, que tienen las atracciones de EuroDisney es que son casi todas cubiertas y no puedes ver cómo es hasta que estás haciendo el recorrido, y para entonces es posible que te parezca que ya es demasiado tarde. Eso me pasó en mi atracción preferida de EuroDisney, el Rock 'n' Roller Coaster, que cuando me quise dar cuenta de lo que era la primera vez ya no podía hacer nada para evitar dar la vuelta entera. Es una atracción que, en una recta, arranca a toda velocidad para después subir y después bajar, girar, volver a subir, volver a bajar... Yo no esperaba la reacción que tuve cuando el coche arrancó después de la cuenta atrás, pero durante un segundo, quizá dos, lo que pasó realmente es que mi cuerpo no obedeció ninguna de las señales que mi cerebro trataba de enviar. La principal: coger aire y gritar.
Pues bien, sabiendo cómo había reaccionado en el Rock 'n' Roller Coaster, decidí que no me volvería a pasar lo mismo, así que cuando estábamos llegando a lo más alto, cerré los ojos y cuando noté que empezábamos a bajar comencé a gritar. ERROR. Debería haber mirado sin duda porque hice el más espantoso de los ridículos. Mis gritos sonaban como si el coche estuviera bajando a 200 km/h pero la realidad era muy diferente. Estábamos en una mini bajada de metro y medio y yo no me di cuenta hasta que mi amigo, sentado a mi derecha, me dijo:
- Pero Fani... ¿qué haces?
Le agradezco la delicadeza en la pregunta porque seguramente por su cabeza estaría pasando algo así:
- Pero Fani, ¿qué coño estás haciendo? Deja de gritar que nos está mirando todo el mundo.
Y no le culpo, bueno ni a él ni a mis cuñados que iban justo detrás nuestra y que también disfrutaron de lo lindo con la situación. Al final, claro está, abrí los ojos justo cuando empezaba la primera bajada que me había comentado mi hermana. Y grité, pero la verdad sea dicha de paso, grité por afición, no porque realmente me hiciera falta desahogarme.
De la atracción vi más bien poco desde abajo, por lo que fui con la idea de que después de la primera subida estaba la primera bajada que decía mi hermana. Soy cagueta, ya lo he puesto en el título del post así que no es ningún secreto para nadie, por lo que me dije a mí misma que la primera bajada era mejor hacerla con los ojos cerrados. Mi intención realmente era abrirlos a mitad de camino para después disfrutar de la atracción entera. Aquí quizás sea necesario hacer un alto y explicar que cuando el año pasado estuve en EuroDisney (¡a mi edad!) fue la primera vez que monté en una montaña rusa y me gustó la experiencia. Lo bueno, y al mismo tiempo lo malo, que tienen las atracciones de EuroDisney es que son casi todas cubiertas y no puedes ver cómo es hasta que estás haciendo el recorrido, y para entonces es posible que te parezca que ya es demasiado tarde. Eso me pasó en mi atracción preferida de EuroDisney, el Rock 'n' Roller Coaster, que cuando me quise dar cuenta de lo que era la primera vez ya no podía hacer nada para evitar dar la vuelta entera. Es una atracción que, en una recta, arranca a toda velocidad para después subir y después bajar, girar, volver a subir, volver a bajar... Yo no esperaba la reacción que tuve cuando el coche arrancó después de la cuenta atrás, pero durante un segundo, quizá dos, lo que pasó realmente es que mi cuerpo no obedeció ninguna de las señales que mi cerebro trataba de enviar. La principal: coger aire y gritar.
Pues bien, sabiendo cómo había reaccionado en el Rock 'n' Roller Coaster, decidí que no me volvería a pasar lo mismo, así que cuando estábamos llegando a lo más alto, cerré los ojos y cuando noté que empezábamos a bajar comencé a gritar. ERROR. Debería haber mirado sin duda porque hice el más espantoso de los ridículos. Mis gritos sonaban como si el coche estuviera bajando a 200 km/h pero la realidad era muy diferente. Estábamos en una mini bajada de metro y medio y yo no me di cuenta hasta que mi amigo, sentado a mi derecha, me dijo:
- Pero Fani... ¿qué haces?
Le agradezco la delicadeza en la pregunta porque seguramente por su cabeza estaría pasando algo así:
- Pero Fani, ¿qué coño estás haciendo? Deja de gritar que nos está mirando todo el mundo.
Y no le culpo, bueno ni a él ni a mis cuñados que iban justo detrás nuestra y que también disfrutaron de lo lindo con la situación. Al final, claro está, abrí los ojos justo cuando empezaba la primera bajada que me había comentado mi hermana. Y grité, pero la verdad sea dicha de paso, grité por afición, no porque realmente me hiciera falta desahogarme.
Comentarios
Yo no es que sea muy valiente con esas cosas pero mi táctica es pensar en las dos opciones que tengo:
1. Estar nervioso y pasarlo mal.
2. Estar tranquilo y pasarlo.
Así que pongo cara de "aquí no pasa nada, alguien tiene un cigarrillo que echarme a la boca?", mi mente le comunica eso al corazón para que deje de latir tan rápido y en seguida puede arrancar la fiesta jejeje. Debí ser algo medio budista en una vida anterior, no veas como me relajo :D
Muy buenos estos dos posts, ya se te echaba de menos :D
// Carlos, el del blog de al lado
Has estado en Port Aventura? Tú lo tienes bastante más cerca que yo.
Me ha encantado tu firma ;-)
Recuerdo que cuando me subi en el Dragon pensé: cojo aire y grito. Pero me duro tan poco el pensamiento porque aquello arrancó a toda pastilla que no me dio tiempo a coger aire asi que no chillé. Eso si, mi cara era un poema o eso me dijeron.
Me encanta tu blogg aunque no te escriba comentarios todas la veces.
Cobos.
Yo llevo dos semanas chungas, de lio en el trabajo y en casa y me cuesta más dejar comentarios, pero en seguida vuelvo!
Buen finde
Sabes que cuando quieras puedes pasarte por aquí... y que yo te estaré esperando :-)
Que pases buen finde tú también!